Los acuarios son biosistemas establecidos de forma artificial, los cuales mantienen todas las funciones que ocurren naturalmente en el ambiente. En consecuencia, el CO₂ o dióxido de carbono es vital para que se ejecuten todos los procesos requeridos por los seres vivos que habitan en él. Una forma de maximizar la presencia de este elemento, es mediante el uso de un Kit de CO₂ para acuarios, el cual muchas veces es un poco complicado de utilizar por los principiantes en la acuariofilia.
Para ayudarte con esto, hemos preparado una breve guía con los detalles que debes conocer, así utilizarás eficientemente este implemento en tu pecera, y disfrutarás de todos los beneficios que le brindará a la comunidad que habita en ella.
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Las plantas que están dentro de una pecera, al igual que las terrestres, realizan un proceso denominado fotosíntesis, que es esencial para la producción de oxígeno en el medio.
Las plantas consumen CO₂, que junto con la absorción de nutrientes y de la energía lumínica, le ayudan a producir y expulsar O2 u oxígeno al entorno. Este es aprovechado por los demás seres vivos que se encuentran a su alrededor.
Es posible que en algún momento hayas visto una especie de burbujeo en el interior del acuario, ¿cierto? Cuando eso pasa, es porque las plantas están en pleno proceso de fotosíntesis, generando el oxígeno que requieren los peces para completar su proceso de respiración.
Es posible que las plantas presentes en nuestra pecera no tengan la cantidad suficiente de CO₂ para culminar los ciclos bilógicos.
Afortunadamente, los acuaristas pueden hacer uso de un Kit de CO₂ para acuarios; el cual es un equipo especializado que libera periódicamente pequeñas cantidades de dióxido de carbono en el agua, para que las plantas o cualquier sistema vegetal presente en el acuario realicen la fotosíntesis de forma adecuada.
El aporte extra de CO₂ en las peceras va a ayudar a que las plantas puedan ejercer la producción de oxígeno sin consumir los carbonatos presentes en el agua.
Cuando el plantado carece del dióxido de carbono, debe recurrir a los elementos presentes en el acuario, y se crea una competencia con los peces por los nutrientes.
De esta forma el KH se altera, y por ende ocurre una desestabilización en el PH, causando estrés en los peces que habitan en el acuario.
Entonces, al hacer uso de una fuente adicional de dióxido de carbono, no solo se fomenta la producción de CO2, sino que se le facilita a las plantas acuáticas la realización de la fotosíntesis, los peces tendrán el oxígeno necesario y el agua se mantiene equilibrada con los nutrientes que requiere.
Como ya hemos visto, hacer uso de un mecanismo generador de CO₂ va a ser de gran beneficio para tu acuario, ya que te otorgará las siguientes ventajas:
El CO₂ es una sustancia que se puede administrar de distintas formas en el acuario, por eso existen distintos tipos de Kit en el mercado.
Este modelo se basa en un sistema de botella con una electroválvula que se encarga de agregar el dióxido de carbono al agua.
Es una alternativa de las preferidas por los expertos, ya que es un solenoide quien va a regular la administración del CO₂ en el día, evitando que se sature por la noche el ecosistema o se afecte la oscilación del PH en el agua.
Con el uso del CO₂ en forma líquida, se combaten eficientemente las algas y las alteraciones químicas en el interior del recipiente.
Está indicado para los acuarios pequeños y los nanos.
Aunque este es un sistema más básico, también es una manera de equilibrar el interior de la pecera.
Solo agregas las pastillas según las instrucciones del producto, y ellas se encargan del resto.
Esta es una de las opciones más modernas del mercado.
Este mecanismo dosifica la cantidad de CO₂ en función al tamaño del acuario.
Solo se debe sumergir en una plancha que se conecta a un regulador encargado de medir el nivel necesario de acuerdo al agua.
De acuerdo al sistema que elijas según tu conveniencia, será la forma de inyección del CO₂ en el acuario.
Lo importante es que las plantas en su interior puedan tomar esa sustancia y completar la fotosíntesis para generar el O2.
Eso sí, recuerda que siempre este equipo se debe manipular con precaución para evitar posibles accidentes, ya que se trata de un gas.
Si ya has tomado la decisión de instalar uno de estos mecanismos en tu acuario, lo mejor es que te apoyes con algún experto acuarista o en una tienda especializada que te dé la asesoría en cuanto a la dosificación y el tipo de inyección más adecuada a tu situación.
Recuerda que calcular los litros del acuario, así como cuántos peces puedes meter en acuario serán dos valores determinantes para el cálculo del CO₂ óptimo.
De forma literal cada acuario es un mundo distinto. Entonces, la mejor manera de saber la cantidad de CO2 específica para el tuyo es hacer un test para acuarios, y así se evitan las generalizaciones que pueden afectar el ecosistema de tu pecera.